Quemaduras Leves
 
A continuación, describiremos el procedimiento para limpiar un sistema de cualquier tamaño, cuando la quemadura ha sido leve. En estos casos, también es necesario realizar las pruebas de acidez y color del aceite. Aunado a lo anterior, también es necesario determinar las causas de la quemadura, y efectuar las correcciones respectivas. 
 
Cuando la quemadura es leve, la mayor parte de los contaminantes se remueven con el cambio de aceite (o compresor); los restantes se eliminan al cambiar el filtro deshidratador de la línea de líquido, o instalando uno si no se tenía. Los procedimientos a seguir son dos, dependiendo si el compresor cuenta con válvulas de servicio o no.
 
A. Si el compresor no tiene válvulas de servicio. Esto sucede cuando el sistema es pequeño, con compresor hermético, y la cantidad de refrigerante generalmente no justifica el costo del proceso de recuperación. Siga el procedimiento recomendado para sistemas pequeños.
 
A1. Si se desea salvar el refrigerante, se puede transferir éste a un cilindro frío y vacío, por diferencia de presión. Se debe instalar un deshidratador en la manguera con la que se va a transferir al cilindro. También, si se tiene la facilidad, se puede emplear una máquina de recuperación y reciclado aprobada por ARI y UL, para recuperar la mezcla de aceite y refrigerante. Si no se requiere salvar el refrigerante, deberá descargarse adecuadamente en forma líquida en un lugar ventilado.
 
NOTA: Cualquiera que sea la elección de los tres casos antes mencionados, si el sistema tiene condensador enfriado por agua, ésta deberá estar circulando cuando se esté descargando el refrigerante, o deberá drenarse totalmente antes de descargar el refrigerante. Esto es con el objeto de evitar que se congele dentro de los tubos y los rompa.
 
A2. Si el sistema tenía filtro deshidratador, éste deberá retirarse, y en su lugar, deberá instalarse uno nuevo sobredimensionado; es decir, de una capacidad mayor. Si el sistema no tenía filtro deshidratador, deberá instalarse uno en la línea de líquido. En sistemas un poco más grandes, también se deberá instalar un filtro en la línea de succión, cerca del compresor. La válvula de acceso permitirá revisar la caída de presión.
 
A3. Inspeccione todos los dispositivos de control, tales como válvulas de termo expansión, solenoides, reversibles, retención, tubo capilar, indicador de líquido, etc. Límpielos completamente o reemplácelos, según sea necesario.
 
A4. Sopleteé el evaporador y el condensador, utilizando nitrógeno. Para el sopleteo, no utilice refrigerante.
 
A5. Retire el compresor quemado e instale el nuevo. Este deberá ser un repuesto exactamente como el original y con la misma capacidad del que se quemó. Se recomienda instalarle válvulas de acceso en la succión y descargarlas cuales servirán tanto para hacer vacío, cargar refrigerante y medir las presiones. Haga una revisión eléctrica completa.
 
A6. Presurice ligeramente el sistema con refrigerante y revise que no haya fugas, utilizando para esto un buen detector, ya sea una lámpara de haluro o un detector electrónico. Si no se cuenta con ninguno de estos dos aparatos, la prueba con jabonadura es satisfactoria.
 
A7. Evacúe el sistema de acuerdo a las recomendaciones del fabricante del equipo. Si no se dispone de ésta, se recomienda el método de la triple evacuación. El compresor nuevo nunca deberá usarse para hacer vacío. Puede emplearse cualquiera de los dos métodos descritos en el punto 8 de sistemas pequeños.
 
A8. Cargue el sistema con refrigerante de acuerdo a las instrucciones del fabricante. Es importante instalar un filtro deshidratador en las mangueras, para a través del mismo cargar el refrigerante evacuado del sistema. Si se instaló un filtro deshidratador en la línea de succión, se puede cargar el refrigerante a través del mismo. Agregue el refrigerante adicional que sea necesario.
 
A9. Ponga el sistema en operación. En sistemas pequeños, la limpieza se lleva a cabo durante la operación y generalmente hasta este paso es suficiente; pero, por seguridad, se recomienda medir la caída de presión a través del filtro deshidratador de la línea de líquido, después de cuatro horas de operación, sin que ésta llegue a rebasar los valores de la tabla 1.17 del capítulo 1. Si la caída de presión está dentro del límite, se deja operar el sistema otras 48 horas y se cambia el filtro deshidratador por el de la medida original, mismo que va a quedar instalado permanentemente.
 
En sistemas poco más grandes, donde se haya instalado un filtro deshidratador en la línea de succión, además del de la línea de líquido, se revisa la caída de presión a través de ambos, y si ésta no excede los valores recomendados, se deja operar otras 48 horas. Generalmente, se puede considerar que hasta este punto la limpieza se ha completado, por lo que deben cambiarse los filtros deshidratadores por unos nuevos, de la misma capacidad que normalmente use el sistema.
 
A10. Después de terminado el procedimiento de limpieza, se recomienda revisar nuevamente el sistema en dos semanas, para asegurarse que las condiciones de opera- ción son satisfactorias.
 
B. Si el compresor tiene válvulas de servicio. El mismo procedimiento que con compresores un poco más gran- des, tanto herméticos como semiherméticos, lo cual facilitará más la labor de limpieza.
 
B1. Si se desea salvar el refrigerante, que es lo más usual, el procedimiento es cerrar las válvulas de servicio del compresor y aislar el refrigerante en el sistema. Retire el compresor quemado.
 
B2. Instale el compresor nuevo de la misma capacidad que el original y conéctelo eléctricamente. Si es un compresor semihermético y sólo se va a reemplazar el motor, el compresor deberá limpiarse completamente antes de instalar el motor nuevo 31%. Si es posible, instale un filtro deshidratador en la línea de succión, antes del compresor.
 
B3. Mediante una bomba adecuada, haga vacío únicamente al compresor y al filtro, para evacuar el aire. Se recomienda utilizar el método de la triple evacuación, punto 8 del procedimiento para sistemas pequeños.
 
B4. Abra las válvulas de servicio del compresor, cierre la válvula de servicio de salida del tanque recibidor, si lo hay, si no, cierre la válvula de paso de la línea de líquido. Esto es con el objeto de recolectar todo el refrigerante en el recibidor (pump down). Como estamos hablando de una quemadura leve, los posibles contaminantes no podrán dañar el compresor durante el breve período que dura esta operación.
 
B5. Una vez recolectado todo el refrigerante, quedarán en vacío la línea de líquido (desde la válvula cerrada), el evaporador y la línea de succión; con lo que se facilitará la inspección y limpieza o cambio de accesorios, como filtros deshidratadores, el indicador de líquido, la válvula de termoexpansión, válvulas solenoides, de retención, etc.
 
Los filtros deshidratadores deberán cambiarse, instalando uno sobredimensionado, es decir, de mayor capacidad que el original.
 
B6. Haga vacío únicamente en la sección que se abrió para cambiar accesorios, utilizando el método de la triple evacuación.
 
B7. Abra la válvula de paso de la línea de líquido o la del tanque recibidor, y ponga a operar el sistema. La limpieza del sistema se lleva a cabo durante la operación y los contaminantes, si los hay, son removidos por el filtro deshidratador. Observe la caída de presión a través del filtro deshidratador, por un mínimo de 4 horas. Si la caída de presión no excede los valores recomendados en la tabla 1.17 del capítulo 1, deje operar el sistema por 48 horas más, y con esto se considera que la limpieza se ha completado. Cambie el filtro deshidratador de la línea de líquido por uno nuevo del tamaño original, para dejarlo instalado permanentemente.
 
B8. Después de haber terminado el procedimiento de limpieza, se recomienda revisar nuevamente el sistema en dos semanas, para asegurarse que las condiciones de operación son totalmente satisfactorias.